
Tengo una muñeca
vestida de piel
con sus balbulitas
me ha costado cien.
La saque a paseo
se prostituyó
la tengo en la cama
con mucho dolor.
Esta mañanita
me dijo el doctor
que le de caballo
bañado en calor.
Dos y dos son cuatro ,
cuatro y dos son seis ,
seis y dos son ocho
y ocho (¿qué decís?).
Y ocho , dieciséis
y ocho , (los fantasmas que hay dentro de mi).
Animas malditas,
las expulso yo.
Tengo una muñeca
vestida de piel
la boquita abierta
hecha de látex.
Me comió el capullo
y me lo arrancó ,
me meto en mi cama
desangrándome.
Dos mas dos son cuatro ,
cuatro y dos son seis.
seis y dos son ocho
y ocho dieciséis
y ocho veinticuatro
y ocho treinta y dos ,
estas son las cuentas
que he sacado yo...
Luego Tanya rodeó con las manos la polla de Mike. El gemía de gozo.
Luego la arrancó de cuajo. La tiró a un lado.
Vi el chisme rodar por la alfombra como una disparatada salchicha, dejando tristes regueruelos de sangre. Fue a dar contra la pared. Allí se quedó como algo con cabeza pero sin piernas y sin lugar alguno a donde ir... lo cual era bastante cierto.
Charles Bukowski, La maquina de follar.
1 comentario:
mientras leía la canción estaba pensando en ese relato y en un nenuco prostituyéndose a la vez.
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